domingo, 12 de enero de 2025

Cinnamon rolls esponjosos

Hace unos años publiqué una receta de cinnamon rolls estilo islandés, que son pequeñitos, como galletas individuales.

Últimamente se han puesto de moda los rolls mucho más grandes que se hornean unos pegados a los otros, y que además en las cafeterías que los hacen los puedes encontrar de muchos sabores: fresas, oreo, limón, red velvet, pistacho, chocolate, carrot cake... y todo lo que la imaginación del pastelero pueda idear.

Se me ocurre que los siguientes los voy a hacer sabor crema de cacahuete con topping cacahuete salado.


Así que aquí voy con mi nueva versión de estos rollitos que están fantásticamente ricos, muy esponjosos y con sabor a canela pero sin pasarse, y ligeramente dulces sin llegar a ser empalagosos.

Para 9 rolls

Masa

  • 50 ml de agua
  • 100 ml de leche
  • 25 g de levadura fresca o 1 cucharadita de levadura seca de panadero
  • 400 g de harina de fuerza
  • media cucharadita de extracto de vainilla
  • una pizca de sal
  • 1 huevo
  • 50 g de azúcar blanquilla
  • 50 gr mantequilla pomada

En una taza mezclar la leche y el agua y meter al microondas 15 segundos si es invierno, para conseguir que esté a 25 grados. Añadir la levadura, mezclar y dejar 5 minutos que se active.

En el bol de la amasadora ( yo kitchenaid) poner el líquido anterior, añadir la harina, la pizca de sal, el huevo, la vainilla, el azúcar y amasar con el gancho durante 5 minutos a velocidad 1.

Añadir la mantequilla que esté bien blanda, si no la ponemos unos segundos al microondas, cortada en cubitos. La vamos añadiendo poco a poco sin dejar de batir, y cuando esté integrada batimos 10 minutos más.

Hacemos una bola con la masa, la dejamos en el bol de la amasadora y cubrimos con un papel film pincelado de aceite, hasta que doble el volumen. Aproximadamente 2 horas.

Relleno

  • 100 g de mantequilla bien blanda, casi líquida. La podemos conseguir poniéndola en el microondas unos segundos
  • 100 gr de azúcar moreno o mascabado
  • 2 cucharaditas de canela
  • 1 pizca de nuez moscada
  • un tercio de vaso de leche con canela, para cubrir los rollitos una vez en el molde.

Mezclamos el azúcar, la canela y la nuez moscada

Estiramos la masa que ya ha levado sobre un papel de horno o una base de silicona, hasta que quede rectangular.

Pincelamos todo el rectángulo con mantequilla, apretando un poco para que penetre en la masa. Espolvoremos por encima con la mezcla de azúcar y especias y enrollamos por el borde largo del rectángulo.

Con la ayuda de un hilo de coser cortamos en las porciones que deseemos, yo lo he hecho en 9.

En un molde cuadrado- el mío de 20x20 cm- rectangular o redondo, vamos colocando los rollitos, sin que queden excesivamente apretados.

Cubrimos con film y dejamos levar unos 45 minutos.

Precalentamos el horno a 200º, yo con aire, pincelamos los rollos ya levados con la leche con canela y horneamos durante 15 minutos.

Glaseado

  • 100 g de azúcar glas
  • un poco de leche, la vamos añadiendo al azúcar y removiendo hasta que veamos que forma una pasta no excesivamente líquida

Sacamos el molde del horno, y a los 10 minutos, que estén templados pero no excesivamente calientes, cubrimos con el glaseado.

Están deliciosos templados, pero también los podemos comer fríos. 

Si los comemos al día siguiente de hornearlos, podemos ponerlos 1 minuto en la airfryer y quedan como recién hechos.


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