A mis hijos, que ya son grandecitos, les pasa algo parecido. Cuando hago un postre que no sea la típica tarta de chocolate - por ellos el pastel siempre sería de chocolate- me preguntan antes de pedirse un trozo ¿mamá, a mi me gusta este pastel? y yo, depende del día les contesto de una manera u otra.
Opción A- claro que te gusta, hijo.
Opción B- no te gusta nada, está malísimo, yo de ti ni lo probaría ( que así tocamos a más)
Hoy a la hora del postre cuando saqué la tarta me decanté por la respuesta A, la probaron y evidentemente se la comieron.
Esta tarta la hice para llevarla a casa de unos amigos que nos habían invitado a cenar y cuando crucé la puerta me decían que no podía haberla hecho yo, que seguro que era comprada. Me pasa muchas veces, algún postre que yo considero muy sencillo o a veces una decoración a la que le encuentro un montón de fallos y luego los no iniciados en la materia cuando la ven opinan que es una maravilla.
Esta es una tarta refrescante y ligera ideal para el verano
Ingredientes:
Para la base:
Galletas maría trituradas mezcladas con queso crema, un chorrito de leche y mantequilla fundida.
Para la crema:
500 gr de nata para montar
300 gr de queso tipo phildelpia
10 láminas de gelatina neutra
3 limones
100 gr de azúcar
100 ml de agua
Para el adorno:
1 sobre de gelatina de limón
2 rodajas de limón ( de uno de los limones anteriores)
Cortamos dos rodajas de un limón que reservamos para la decoración y hacemos zumo con el resto.
Hacemos ralladura con la cáscara de dos limones, y exprimimos el zumo de los dos limones.
Mezclamos el zumo de limón colado ( de los 3 limones anteriores) con el azúcar y el agua y lo calentamos hasta que hierva, diluimos las hojas de gelatina previamente hidratadas, mezclamos con un batidor, añadimos la ralladura de limón y dejamos templar.
Mientras se enfría la mezcla anterior preparamos la base. Trituramos las galletas y las mezclamos con queso, leche y mantequilla fundida. Cubrimos la base del molde- mejor desmontable- que vayamos a usar con la preparación anterior y apretamos bien para que quede compacta.
Para acabar montamos la nata con 3 cucharadas de queso. Añadimos el resto del queso al líquido con la gelatina, mezclamos bien y con una espátula o un batidor manual vamos añadiendo la nata montada poco a poco mezclando con movimientos envolventes.
Vertemos sobre la base de bizcocho y dejamos unas 4 horas en la nevera.
Hacemos gelatina de limón con el sobre poniendo la mitad del agua de la que indiquen las instrucciones, vertemos la gelatina sobre la tarta, decoramos con dos rodajas de limón y volvemos a dejar en la nevera durante 3 o 4 horas antes de servir.
somnisdexocolata by Estela Martínez is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 3.0 Unported License.
Para acabar montamos la nata con 3 cucharadas de queso. Añadimos el resto del queso al líquido con la gelatina, mezclamos bien y con una espátula o un batidor manual vamos añadiendo la nata montada poco a poco mezclando con movimientos envolventes.
Vertemos sobre la base de bizcocho y dejamos unas 4 horas en la nevera.
Hacemos gelatina de limón con el sobre poniendo la mitad del agua de la que indiquen las instrucciones, vertemos la gelatina sobre la tarta, decoramos con dos rodajas de limón y volvemos a dejar en la nevera durante 3 o 4 horas antes de servir.
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