En mi reciente obsesión por el coco he usado por primera vez harina de coco para cocinar.
Esta harina es diferente del coco rallado, se obtiene después de desecar la pulpa del coco a baja temperatura consiguiendo un producte con una textura similar a la harina de trigo.
Es una harina suave con propiedades nutricionales muy interesantes: no tiene gluten, es una buena fuente de proteinas y de fibra y tiene un bajo índice glucémico.